
Muchos de los esfuerzos de los militantes y simpatizantes de un candidato se pierden por la ineficiencia a la hora de diseñar el trabajo de Promoción del Voto. Por eso conviene desde el inicio, a la hora de precisar la Estrategia, establecer Criterios Generales para las actividades de los promotores voluntarios. Aquí expongo algunos criterios para eficientar el trabajo del área de promoción:
• Deberá estar basada en una estructura operativamente descentralizada y desconcentrada.
• Las acciones de promoción del voto deberán tener efectos multiplicadores medibles para garantizar la rentabilidad de las mismas.
• Los programas de promoción contarán con esquemas definidos de organización y comunicación con los simpatizantes captados.
• Todos los programas de promoción deberán considerar las acciones de movilización de los votantes el día de la jornada electoral.
• Tendrán que levantarse bases de datos de los simpatizantes, de acuerdo a un formato uniforme, que se apruebe en el grupo de trabajo.
• Deberán poner a disposición de la coordinación de promoción del voto copias de las bases de datos simpatizantes para el trabajo de regionalización y para las acciones de validación.
• Todas las acciones y programas de promoción deberán contar con métodos y tiempos para la evaluación de sus avances.
• Prevalecerán las acciones de promoción del voto sin candidato y se evitará ofrecer la presencia del mismo sin tener la garantía de la misma.
• Se privilegiarán las acciones de promoción sin costo económico o que tengan una alta rentabilidad en la relación costo-beneficio.
• Todas las actividades de promoción de ajustarán a los señalado por las leyes.
